Shawn Corey Carter, nombre verdadero del cantante, músico y productor, ocupa por segundo año consecutivo el primer puesto de la lista que la revista publicó hoy en su web y que dedica a los que llama "reyes del hip-hop", un ranking que demuestra, según Forbes, que "los raperos tienen maneras de prosperar incluso en una crisis económica".
Los ingresos de Jay-Z, que está casado con Beyoncé Knowles, proceden en gran parte de las ventas de su último disco, "The Blueprint 3", y la gira de promoción del mismo; así como a sus aventuras como empresario de Broadway, con el musical "Fela!", su inversión en el equipo de baloncesto de los Nets de Nueva Jersey y sus discotecas 40/40.
Jay-Z ganó más del doble que Sean "Diddy" Combs, que ocupa el segundo puesto de la lista con 30 millones de dólares, gracias a la buena marcha de su más reciente álbum ("Last Train to Paris") y su discográfica, así como sus aventuras en el cine ("Get Him to the Greek") y en el negocio de la moda, entre otros.
El tercer puesto corresponde al cantante de origen senegalés Aliuane "Akon" Thiam, con 21 millones de dólares, a quien siguen Dwayne "Lil Wayne" Carter (20 millones), sentenciado en marzo a un año de cárcel en Nueva York por posesión ilegal de armas, y Andre "Dr. Dre" Young (17 millones).
Los siguen otros pesos pesados del hip-hop, como Christopher "Ludacris" Bridges, con 16 millones de dólares, Calvin "Snoop Dogg" Broadus (15 millones), Timothy "Timbaland" Mosley (14 millones), Pharrell Williams (13 millones) y, cerrando las diez primeras posiciones, Kanye West (12 millones).
Entre otros de los artistas que aparecen en la lista destaca la presencia del conocido Eminem -uno de los pocos raperos de raza blanca-, que ocupa el puesto catorce con unas ganancias de 8 millones de dólares.
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