El cuerito de "Baby" hizo una parada rápida pues abordó su jet privado rumbo a Melbourne para otro concierto de su tour "My World" que tendrá lugar esta semana.
En cuanto a su estancia en Sydney, Justin quedó empañado luego de que desde el público fuera agredido con una ráfaga de huevos en momentos que interpretaba el tema "Acer".
Afortunadamente, la sensación juvenil pudo evitar los seis huevos los que cayeron sobre el escenario, pues Bieber llegó a esquivarlos cuando iban directo hacia él.
Tras el ácido suceso, el cantante canadiense continuó con el recital que ofrecía sin inmutarse. Aunque fue evidente que su ropa quedó salpicada con restos de los huevos que fueron lanzados por "enemigos declarados" del exitoso cantante.
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